Todo puede ser en este mundo.

Según el Dr. John Delony, especialista en salud mental y autor con más de dos décadas de experiencia en asesoramiento y relaciones humanas, aproximadamente el 85% de las infidelidades matrimoniales tienen su origen en el trabajo. La cercanía diaria, la convivencia y la complicidad profesional favorecen la creación de vínculos emocionales que pueden derivar en relaciones extramatrimoniales.

Además, una encuesta realizada por la plataforma británica RANT Casino, en la que participaron miles de personas, reveló que uno de cada cinco encuestados admitió haber sido infiel con un compañero de trabajo. El estudio también identificó las profesiones con mayor incidencia de este tipo de relaciones: los empleados del área de ventas lideran la lista, con un 14,5%; les siguen los docentes (13,7%) y el personal sanitario (12,5%).

Los especialistas explican que factores como la interacción constante, la complicidad profesional y las expectativas poco realistas en las relaciones pueden empujar a algunas personas a buscar conexión emocional dentro del ambiente laboral.